“EL PROCESO DE CAMBIO EN LAS ADICCIONES”
Nos podemos preguntar en repetidas ocasiones ¿Qué es lo que se requiere para que nosotros mismos u otra persona ya sea amigo, familiar o conocido realicemos un cambio? Como si hubiese una receta para hornear algún pastel o preparar tu platillo favorito.
En realidad, es muy complicado que nos llegue una respuesta si ni si quiera hacemos el intento por buscarla en nosotros mismos, y digo en nosotros mismos puesto que si tan solo nos detuviéramos a analizar nuestra vida diaria nos daríamos cuenta de lo que se requiere. En pocas palabras tenemos la solución en nuestras manos, pero nos negamos a actuar.
En lo que respecta a las adicciones se pasa por un proceso que inicia con la negación de la dependencia, en realidad está basado en generar conciencia de enfermedad y de la problemática, así como la necesidad de realizar cambios en su vida.
Aunque cada persona es diferente y se lleva un proceso distinto podemos mencionar algunas etapas precisas por las cuales se atraviesa cuando se quiere conseguir el cambio:
Ausencia de conciencia del problema: En esta etapa la persona no se da cuenta de que existe un problema, pues realmente no ha hecho analisis de ello. En la adicción el usuario no está motivado a buscar ayuda pues ni si quiera acepta que es un conflicto.
Consideración del cambio: Aquí la persona comienza a pensar acerca de las posibilidades de realizar un cambio, pero como tal no se traduce en acciones concretas. Con la adicción, se va desarrollando una conciencia del problema que va de menor a mayor.
Acción: Es aquí el momento en el cual la persona está preparada para actuar y hacer los cambios necesarios.
Manteniendo los cambios: Una vez llevado a cabo los cambios hay que mantenerlos y reforzarlos lo suficiente para que se hagan permanentes. Es común que las personas en recuperación, se descuiden en esta fase porque en ocasiones no hay adecuada conciencia de los riesgos ante una recaída.
Abrazando el cambio: Una vez que los cambios se han mantenido por un largo tiempo, los disminuyen o cesan, sin embargo, en la adicción no se está exento de recaídas.
La recuperación es un proceso continuo de abrazar los cambios.
Ahora que conocemos lo que implica para una persona con adicción el realizar cambios en su consumo y su manera de ver la realidad, es posible comprender mejor el camino que se sigue durante la recuperación y a su vez podemos acompañar y motivar a nuestro ser querido ya sea familiar o amigo en su proceso a lograr una mejor vida.